lunes, 25 de marzo de 2013

¡Cómo no Amar...!

Cómo no amar lo naturalmente bello
si me nutre el alma y acaricia los sentidos;
si su etérea esencia la percibo a diario
en el aire,
en las palabras “te quiero”,
en el abrazo del tiempo,
en palpitares,
miradas,
aromas,
recuerdos.

Cómo no amar la belleza
si late en los sonrojos del alba,
en el color de las flores que a diario miro;
en los matices del cielo,
de los árboles,
campos,
cerros…

 Me embeleso al sentirla
en el trinar de las aves,
en el canto de algún río, del mar y la lluvia,
en la juguetona risa de mi nieto,
en sus sonoros besos y suspiros.

Y a ti, vida mía,
cómo no voy a amarte
si te enredas divino entre mis sueños,
si cultivas mis pasiones,
mis rosales y furtivos versos;
si has hecho tuyo mi mundo.
¡Nuestro mundo!

Cómo no amar…

ISABEL.
25/03/13.

domingo, 17 de marzo de 2013

Eres de mis antojos

Te veo y se me antojan tantas cosas.
Como bucear en los verdes lagos
que exponen tus miradas luminosas...

Y paladear a pequeños tragos
el aromado licor de tu boca,
supremo néctar que rebasa halagos.

Quisiera ser lo que tu mano toca.
O un suspiro en el aire que respiras...
La caricia que cimbra hasta la roca.

No pienses que estoy diciendo mentiras.
Quisiera ir tras la huella de tus pasos
y ser la musa por la que deliras.

Y se me antoja unir nuestros ocasos;
parar el tiempo, tirar los relojes
y desfallecer de amor... en tus brazos.

ISABEL.
17/03/13

martes, 5 de marzo de 2013

Aprendiz de poeta

La musa sugiere diversos versos
en comedia o en melodrama drama.,
que resulten como los besos esos
que apasionados son la llama ama.

Los míos, escuetos impresos presos,
son de vaivén que se reclama clama.
Son volátiles, traviesos, aviesos,
bobadas que van entre rama rama.

Si es Calíope exigente mi gente
resultaré reprobada probada.
Esa poeta de inocente mente.

Mi lira gime en su balada lada.
¿O simulará que presiente siente
con loca y desentonada tonada?

ISABEL
05/03/13

viernes, 1 de marzo de 2013

¡Qué cante la lluvia!

Llueve. Desteje el cielo níveo encaje.
Cae en forma suave, casi callada,
acariciando el árido paisaje
y a mi alma, que le dice emocionada:

Lloviznita, me encanta tu masaje.
Rocías candor y tu bocanada
huele rico, quizás a tu celaje,
a esa densa espuma blanca perlada.

Pero, ¿bastará a la sed del invierno?
¡Crécete…! Desborda tu canto hermoso,
pon tu lloro sentimental, más tierno.

Y remarca con tu cincel acuoso,
al amor que es mi sueño sempiterno,
para que fluya… limpio y generoso.

ISABEL
01/03/13